San José, el hombre a quien Dios le llamaba padre

Dios siempre elige lo más hermoso

Dios Todopoderoso –para el que “nada es imposible” (Lc 1, 37) y que todo lo gobierna con sabiduría infinita– posee lo que pudiéramos llamar “su única limitante”: al crear no puede hacer nada que no sea bello y perfecto, o que no se destine a su gloria. Cuando determinó la Encarnación del Verbo desde la eternidad, el Padre quiso que la llegada de su Hijo al mundo estuviera revestida con la suprema pulcritud que conviene a Dios, no obstante los aspectos de pobreza y humildad a través de los cuales habría de mostrarse. Dispuso que naciera de una Virgen, concebida a su vez sin pecado original y reuniendo en sí misma las alegrías de la maternidad y la flor de la virginidad. Pero, para completar el cuadro, se imponía la presencia de alguien capaz de proyectar en la tierra la “sombra del Padre”. Fue la misión que Dios destinó a san José, el que bien merece las palabras dichas por la Escritura sobre su ancestro David: “El Señor se ha buscado un hombre según su corazón” (1 Sam13, 14).

Varón justo por excelencia

Tomando en cuenta el axioma latino nemo summus fit repente (“nada grande se hacede repente”) y aquella certera frase de Napoleón, “la educación de un niño empieza cien años antes de nacer”, es probable que en vista de su misión y de su rol como educador del Niño Dios, José haya sido santificado en el claustro materno al igual que san Juan Bautista en el vientre de santa Isabel; una tesis defendida por muchos autores y que puede sintetizarse en las palabras de san Bernardino de Siena: “Siempre que la gracia divina elige a alguien para un favor especial o para algún estado elevado, le concede todos los dones necesarios para su misión; dones que lo adornan abundantemente”.

El Evangelio traza la alabanza de José en una sola y breve frase: era justo. Tal elogio, a primera vista de un laconismo desconcertante, no es nada mediocre. El adjetivo “justo”, en lenguaje bíblico, designa la reunión de todas las virtudes. El Antiguo Testamento llama justo al mismo que la Iglesia concede el título de santo: justicia y santidad expresan la misma realidad.

El mismo silencio de las Escrituras a su respecto revela una faceta primordial de su perfección: la contemplación. San José es el modelo del alma contemplativa, más ansiosa de pensar que de actuar, aunque su oficio de carpintero le hiciera consagrar bastante tiempo al trabajo. Vemos realizada en él la enseñanza de santo Tomás: la contemplación es superior a la acción, pero más perfecta es la unión de una y otra en una misma persona.

Al serrar la madera, fabricar un mueble o un arado, José conservaba siempre su espíritu orientado al aspecto más sublime de las cosas, considerándolo todo bajo el prisma de Dios. Sus gestos reflejaban la seriedad y la altísima intención con que siempre actuaba, y esto contribuía a la excelencia de los trabajos ejecutados.

Su humilde condición de trabajador manual no le quitaba su nobleza, antes bien, reunía admirablemente ambas clases sociales. Como legítimo heredero del trono de David, mostraba en su porte y semblante la distinción y donaire propios de un príncipe, pero a ellos añadía una alegre sencillez decarácter. Más que la nobleza de la sangre, le importaba aquella otra que se alcanza con el brillo de la virtud; y esta última la poseía ampliamente.

Sin embargo, la Providencia lo destinaba al honor más alto que pueda recibir una criatura concebida en pecado original, colocándole en desproporción con el resto de los hombres. San Gregorio Nacianceno dice:“El Señor conjugó en José, como en un sol, todo cuanto los demás santos reunidos tienen de luz y esplendor”.

Todas las glorias se acumulaban en este varón incomparable,cuya existencia terrena avanzó en una sublimidad ignorada por sus conocidos y compatriotas, en silencio y oscuridad casi totales. Leer más…

Fuente: Revista Heraldos del Evangelio, Marzo/2007, n. 63, p. 18 a 25

 

Las preguntas que todos nos hacemos sobre la renuncia de Benedicto XVI

Las preguntas que todos nos hacemos sobre la renuncia de Benedicto XVI

23 respuestas breves a 23 interrogantes

La renuncia de Benedicto XVI ha suscitado preguntas legítimas no sólo en el mundo católico. Algunos de esos interrogantes son de carácter práctico mientras que otros tienen implicaciones más profundas en sus respuestas.

El portavoz oficial de la Sala de Prensa de la Santa Sede, padre Federico Lombardi, ofreció varias ruedas de prensa entre el 12 y 15 de febrero. Durante el breafing, diferentes periodistas le plantearon cuestiones que el padre Lombardi respondió con la información disponible en esos momentos. De esas contestaciones, ofrecemos una selección ágil y breve de 23 respuestas en torno a las cuestiones más presentes en la opinión pública de estos días.

1. ¿Cuál será la última aparición pública de Benedicto XVI como papa en funciones?

R/ La última aparición pública (y masiva) de Benedicto XVI como papa será la audiencia general del miércoles 27 de febrero de 2013 en la plaza de san Pedro del Vaticano. De forma extraordinaria, la audiencia general contará con una liturgia de la Palabra y momentos de oración. Al día siguiente, jueves 28, está prevista una audiencia privada en la sala Clementina de la Santa Sede con algunos cardenales. Será la última audiencia de su pontificado.

2. ¿Benedicto XVI tiene alguna enfermedad grave en particular?

R/ No, Benedicto XVI no tiene una enfermedad grave en particular.

3. ¿Es verdad que Benedicto XVI tiene un marcapasos?

R/ Sí, es verdad que Benedicto XVI tiene un marcapasos. Lo tiene desde que era cardenal-prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Hace algunas semanas le cambiaron las baterías del marcapasos.

4. ¿La encíclica sobre la fe que Benedicto XVI estaba escribiendo será publicada?

R/ No, no está previsto que la encíclica sea publicada dado que Benedicto XVI no la pudo concluir. Eventualmente, si decidiera hacerla pública, no entraría dentro del rango de «encíclica».

5. ¿Por qué Benedicto XVI eligió las 20:00 del 28 de febrero para concluir su ministerio como papa?

R/ Porque es la hora en que él habitualmente concluye su jornada de trabajo.

6. ¿Dónde vivirá Benedicto XVI después de su retiro como Papa?

R/ Inicialmente, por un periodo de dos meses, en la residencia pontificia de Catelgandolfo. Posteriormente regresará al Vaticano para vivir en el monasterio de clausura Mater Ecclesiae.

7. ¿Es verdad que Benedicto XVI decidió dimitir durante su viaje apostólico a México?

R/ Durante su viaje apostólico a México y Cuba, Benedicto XVI maduró el tema de su abdicación como una etapa más en el largo proceso de su reflexión y discernimiento sobre este tema. Por lo demás, el viaje no ha tenido ninguna otra relevancia particular al respecto.

8. ¿Cuál será nombre y título de Benedicto XVI después del 28 de febrero?

R/ Es un tema que aún se está reflexionando. Hay cierta unanimidad en que conservará el nombre de Benedicto XVI y que el título será el de «Obispo emérito de Roma». En el Anuario Pontificio «Benedicto XVI» seguirá siendo el nombre oficial utilizado.

9. ¿Participará Benedicto XVI en el Cónclave para elegir a su sucesor?

R/ No, Benedicto XVI no participará en el Cónclave para elegir a su sucesor ni será parte del Colegio Cardenalicio.

10. ¿Cómo se vestirá Benedicto XVI después del 28 de febrero?

R/ Todavía no se sabe cómo se vestirá Benedicto XVI después del 28 de febrero.

11. ¿La renuncia de un papa está prevista en la Iglesia?

R/ Sí, la abdicación de un papa está prevista y regulada por el Código de Derecho Canónico.

12. ¿Qué pasará con monseñor Georg Gänswein, secretario particular de Benedicto XVI y prefecto de la Casa Pontificia desde hace pocos meses?

R/ Monseñor Georg Gänswein continuará siendo secretario particular de Benedicto XVI, le acompañará a Castel Gandolfo (y luego al monasterio Mater Ecclesia), y también seguirá siendo prefecto de la Casa Pontificia. Análogamente, es posible que el segundo secretario particular se traslade a Castelgandolfo y acompañe a Benedicto XVI por un tiempo.

13. ¿Quiénes vivirán con Benedicto XVI en el monasterio Mater Ecclesia dentro del Vaticano, luego de su retiro?

R/ Las Memores (grupo de mujeres consagradas, miembros de la familia pontificia, que auxilian al papa en las necesidad ordinarias de todo hogar) y su secretario particular, monseñor Georg Gänswein, vivirán y asistirán a Benedicto XVI después de su retiro.

14. ¿El tema del así llamado «Vatileaks» (filtración de documentos reservados) influyó en la decisión del Papa?

R/ No ha tenido ninguna relevancia. Si se quiere recibir una información correcta se debe limitar a cuanto ha dicho el papa sobre su renuncia.

15. Aproximadamente, ¿cuándo podría comenzar el Cónclave?

R/ Las fechas más convincentes apuntan a que iniciará entre el 15 y 20 de marzo.

16. ¿Benedicto XVI cambió las normas para la elección de un papa en las últimas semanas?

R/ No. Benedicto XVI no cambió recientemente las normas para la elección de un Papa. En 2007 hizo un pequeño cambio para modificar el sistema de votación. Esa modificación de 2007 establece que siempre será necesaria una mayoría de dos tercios en las votaciones que se realizan en el cónclave. Por lo demás, el resto de las normas vigentes siguen siendo las de la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis.

17. ¿Cuál es el término correcto para denominar lo que ha hecho el papa?

R/ «Renuncia» sería el término más específico y técnico. «Dimisión» no porque supone que alguien acepta la dimisión para que surta efecto y, en el caso del papa, esto no es necesario. «Abdicación» es un término más adecuado para un rey.

18. ¿Hay luchas por el poder en el Vaticano?

R/ En toda institución existe una dinámica que lleva a opiniones diversas, lo que es siempre una riqueza. La diferencia y diversidad de opiniones son positivas si llevan al bien de la institución misma. Tales diferencias, sin embargo, no se deben sobrecargar pues no corresponderían a la realidad ni a las intenciones de las personas. Afirmar que hay luchas de poder no corresponde a la realidad de lo que está pasando en la Iglesia en estos momentos.

19. ¿El periodista Peter Seewald entrevistó a Benedicto XVI antes de su renuncia?

R/ El periodista alemán Peter Seewald, quien en el pasado ha entrevistado varias veces a Joseph Ratzinger-Benedicto XVI, entrevistó hace dos meses y medio a Benedicto XVI. La entrevista se enmarca en la biografía oficial de Benedicto XVI en la que está trabajando Seewald.

20. ¿Benedicto XVI se encontrará con el nuevo papa?

R/ No está previsto que Benedicto XVI se encuentre con el nuevo papa.

21. ¿Por qué Benedicto XVI decidió quedarse –luego de los dos meses en Castel Gandolfo– en un monasterio en el Vaticano y no regresar a su Baviera natal?

R/ Aunque Benedicto XVI no lo ha explicitado claramente, la presencia y oración de Benedicto XVI en el Vaticano da una continuidad espiritual al papado. Por lo demás, Benedicto XVI vive en el Vaticano desde hace más de tres décadas.

22. ¿Cuáles son las razones exactas aducidas por Benedicto XVI para su renuncia?

R/ El lunes 11 de febrero el papa Benedicto XVI dijo explícitamente que ha «llegado a la certeza de que, por la edad avanzada, ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino» y también ha mencionado que para gobernar la Iglesia y anunciar el Evangelio «es necesario también el vigor tanto del cuerpo como del espíritu, vigor que, en los últimos meses, ha disminuido en mí de tal forma que he de reconocer mi incapacidad para ejercer bien el ministerio que me fue encomendado».

23¿Cuál es la agenda oficial de Benedicto XVI del 11 al 28 de febrero de 2013?

R/ El calendario oficial de Benedicto XVI, a partir de hoy, es el siguiente:

23 de febrero: Conclusión de los ejercicios espirituales.

24 de febrero: Último Ángelus de Benedicto XVI en la plaza de san Pedro.

25 de febrero: Audiencia privada a algunos cardenales.

27 de febrero: Última audiencia general de Benedicto XVI.

28 de febrero: A las 11 de la mañana saludo a los cardenales en la Sala Clementina del Vaticano. A las 17:00 se transfiere a Castel Gandolfo. A las 20:00 inicia la Sede Vacante.

Fuente: bloghttp://actualidadyanalisis.blogspot.com

El amor al eslabón más débil de una cadena mística que une la Tierra con el Cielo

El primado de Pedro y su infalibilidad son las garantías de la invencibilidad de la Iglesia, de modo que se puede ver en el Papa la expresión de la unidad y verdad eclesiales. Pero, ¿la sujeción a la autoridad suprema de un hombre no representaría una humillación para todos los fieles?

A esta pregunta le da una luminosa repuesta un líder católico de proyección internacional, quien tuvo dos de sus numerosos libros elogiados por la Santa Sede: el brasileño Plinio Corrêa de Oliveira (1908-1995). El amor por su condición de súbdito del Papa, como católico, era uno de los principales rasgos de su personalidad, y no perdía una oportunidad para manifestarlo. Porque tal sumisión al Romano Pontífice, lejos de ser humillante, es motivo de elevación y alegría para todo el género humano.

Plinio Correa de Oliveira

Plinio Corrêa de Oliveira

En cierta ocasión afirmó este insigne intelectual que así como todos los relojes de la Tierra necesitan regirse por la hora solar, de la misma manera los católicos deben orientarse por otro “sol”: la infalibilidad pontificia, en la que pueden depositar toda su confianza.

De hecho, la razón humana —penetrada por el pecado original— está sujeta a todo tipo de incertidumbres y errores, de los que nacen el caos y la discordia. Por ello, concluía Plinio Corrêa de Oliveira, el Papa, infalible en virtud de la asistencia del Espíritu Santo y con el poder de jurisdicción in universo orbe, es el punto de referencia indispensable para guiar a la razón humana en función de la Fe.

Fuente: (P. Eduardo Caballero Baza, EPRevista Heraldos del Evangelio, Feb/2011, n. 110, pag. 18 a 25)

Leer más…

Bernardette; el mayor milagro de Lourdes

De vuelta a la casa paterna, Bernardette retomó los antiguos quehaceres. En la mañana inolvidable del 11 de febrero de 1858, salió con la hermana Toinette y la amiga Jeanne Abadie para el bosque, con el fin de recoger leña para la chimenea y huesos que vender para comprar algún alimento. Anduvieron bastante hasta llegar a la gruta de Massabielle, donde Bernardette nunca había estado. En el momento en que las despiertas niñas atravesaban el agua helada del río Gave, Bernardette se preparaba para hacer lo mismo.

Ésta es la narración de Bernardette de lo que entonces sucedió: “Escuché un barullo, como si fuese un rumor. Entonces, volví la cabeza hacia la orilla del prado; vi que los árboles no se movían en absoluto. Seguí descalzándome. Volví a escuchar el mismo barullo. Levanté la cabeza, mirando hacia la gruta. Vi a una Señora toda de blanco, con el vestido blanco, un cinturón azul y una rosa amarilla en cada pie, del color de la cadena de su rosario: las cuentas del rosario eran blancas”.

Era la Santísima Virgen que le sonreía y le llamaba para que se aproximara… leer más

(Revista Heraldos del Evangelio, Febrero 2008, Número 55, p. 18 à 23)

Misión Mariana

Desde el domingo 20 de enero hasta el 3 de febrero, se ha realizado una Misión Mariana en el territorio de la Parroquia Corazón de María, en la colonia Escalón, de los PP. Claretianos.

La Misión Mariana consiste en visitar hogares, hospitales, consultorios, clínicas y comercios, con la imagen del Inmaculado Corazón de María de Fátima.

Esta gran Misión comenzó con la Santa Misa, celebrada por el Párroco, el P. Sentre,CM., el domingo 20 de enero y fue finalizada también, como broche de oro, con la Santa Misa celebrada por el mismo P. Sentre, que coronó solemnemente, en nombre de todos los fieles, la Imagen del Inmaculado Corazón de María, el domingo 3 de febrero.

Durante estos 15 días se han vivido momentos de mucha emoción y manifestación de amor hacia la Santísima Virgen por la celestial visita que ella hacía en todos los lugares. Eran muy frecuentes frases como: Gracias Madre por no olvidarte de nosotros; Madre de Jesucristo te entrego a mi familia; Madre bendita Convierte a mi hijo; No sé cómo agradecerles el que hayan venido hasta  este lugar… y así muchas más.

No cabe duda que Nuestro Señor y la Santísima Virgen han dejado una marca indeleble en los corazones de los que fueron agraciados por la presencia de la Imagen del Inmaculado Corazón de María de Fátima.

Basílica de Nuestra Señora del Rosario de los Heraldos del Evangelio

A escasos 30 kilómetros de la ciudad de Sao Paulo, una de las metrópolis más grandes del mundo, se encuentra la Sierra da Cantareira, orgullo de la región por su exuberante riqueza natural.  Hoy en día, esta riqueza natural se conjuga y armoniza con la riqueza de fe, arte y solemnidad de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario.

Invitamos a nuestro querido lector a peregrinar junto con nosotros por los rincones de esta hermosa iglesia, ofrenda del hombre para honrar a María Santísima y unirnos más a Jesús.

Clic: Vea la Basílica por dentro

Santísimo Nombre de Jesús

En nombre del Divino Salvador la Iglesia reza, cura a los enfermos, evangeliza a los pueblos, expulsa a los demonios y, en fin, realiza su obra de salvación de las almas.

Es su nombre: Consejero prudente, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de la paz” (Is 9,5).

¡Qué extraordinario, rico y simbólico es este nombre, que según el profeta Isaías significa “Dios con nosotros”! ¡Qué maravillada debió quedar la Santísima Virgen –que ponderaba todas las cosas en su corazón– cuando el arcángel Gabriel le dijo en el momento de la Anunciación: “Y le pondrás por nombre Jesús”! (Lc 1, 31).

Estas palabras, que quedaron grabadas indeleblemente en el Inmaculado Corazón de María, llegan hasta los oídos de los fieles de todos los tiempos, en el orbe entero, fecundando los buenos afectos de todo hombre bautizado. A lo largo de los siglos, diversas almas monásticas y contemplativas fueron inspiradas por ellas, al punto que innumerables composiciones de canto gregoriano versan sobre el suave nombre del Hijo de Dios.

Existe una relación misteriosa e insondable entre el nombre de Jesús y el Verbo Encarnado, pues resulta imposible concebir otro más apropiado.

Es el más suave y santo de los nombres; es un símbolo sacratísimo del Hijo de Dios, sumamente eficaz para atraer sobre nosotros las gracias y favores celestiales. El mismo Señor prometió: “Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, él os lo concederá” (Jn 15, 6). ¡Magnífica invitación para repetirlo sin cesar y con ilimitada confianza!

 ¡Invoque este nombre poderosísimo! 

La Santa Iglesia, madre próvida y solícita, concede indulgencias a quien lo invoque con reverencia; incluso pone a disposición de sus hijos la Letanía del Santísimo Nombre de Jesús, para incentivarlos a rezar con frecuencia.

En el siglo XIII, el Papa Gregorio X exhortó a los obispos del mundo y sus sacerdotes a pronunciar muchas veces el nombre de Jesús e incentivar al pueblo cristiano a colocar toda su confianza en este nombre todopoderoso, como un remedio contra los males que amenazaban la sociedad de entonces. El Papa confió particularmente a los dominicos la tarea de predicar las maravillas del Santo Nombre, obra que realizaron con celo, logrando grandes éxitos y victorias para la Santa Iglesia.

Un vigoroso ejemplo de la eficacia del Santo Nombre de Jesús se verificó con motivo de la devastadora epidemia que azotó a Lisboa (Portugal) en 1432. Todos los que podían se fugaban de la ciudad aterrorizados, llevando así la enfermedad a todos los rincones del país. Murieron miles de personas. Entre los heroicos miembros del clero que daban asistencia a los agonizantes estaba un venerable obispo dominico, Mons. Andrés Diaz, que incentivaba a la población a invocar el Santo Nombre de Jesús.

Recorría incansablemente el país, recomendándoles a todos, hasta a los que se habían librado de la terrible enfermedad, que repitieran: Jesús, Jesús. “Escriban este nombre en letreros y guárdenlos sobre sus cuerpos; por la noche pónganlos bajo la almohada; cuélguenlos en sus puertas; pero sobre todo invoquen continuamente, con sus labios y en sus corazones, este nombre poderosísimo”.

¡Maravilla! En un plazo increíblemente breve el país fue liberado por completo de la epidemia, y las personas siguieron confiando agradecidas y con amor en el Santo Nombre de nuestro Salvador. Tal confianza se extendió desde Portugal hasta España, Francia y el resto del mundo.

(Revista Heraldos del Evangelio, Enero/2005, n. 37, pag. 22-25)

Leer más

La Carta de un niño al Niño Jesús

Roma (Lunes, 17-12-2012, Gaudium Press) “¡Amado Niño Jesús! En poco tiempo usted descenderá sobre la tierra. Quería de regalo un misal, una casulla verde y el corazón de Jesús. Seré siempre un buen niño. Saludos – Joseph Ratzinger”. Son los deseos del niño de siete años, el futuro Papa, en una carta encontrada en la casa Pentling, Alemania durante obras de reestructuración.

En 1934, los hermanos Georg y Joseph y la hermana María, escribieron una carta al Niño Jesús, haciendo pedidos de regalos de Navidad. En Baviera existe la tradición de que el Niño Jesús es quien trae los regalos y los deja en el árbol de Navidad. Los niños escriben las cartitas con una lista de sus regalos preferidos.

Georg, que tenía diez años, quería recibir la partitura de una música y una casulla blanca, mientras María, que tenía trece años soñaba con un libro lleno de dibujos. Joseph, que tenía siete años y una escritura muy precisa, pidió un misal, una casulla verde y el corazón de Jesús. Las cartas fueron escritas en una única hoja de papel para economizar, pues en la época el papel costaba caro y la familia Ratzinger no era rica.

El carácter “eclesiástico” de los pedidos no debería sorprender, pues en Alemania en esta época, la Misa era un tema presente en los juegos infantiles, y eso también ocurría en la casa de la familia Ratzinger. “Nosotros dos montábamos juntos el pesebre, y entre los juegos, digamos espirituales, estaba el ‘juego del padre’, que nosotros hacíamos juntos, mi hermana no participaba. Celebrábamos la misa y teníamos casullas hechas por la costurera de nuestra madre”, contó Mons. Georg Ratzinger, en el libro-entrevista con Michael Hesemann titulado “Mi hermano, el Papa”.

La carta estará expuesta hasta el día 6 de enero en Múnich.

Dulce Niño Jesús de Belén, Salvador del Mundo

Era la víspera de Navidad del año 1950. Las piadosas hermanas Carmelitas de San José, bajo la orientación de su Superiora General, Madre Paula del Divino Salvador, recorrían las residencias de la ciudad de Izalco, en El Salvador. Las buenas monjas visitaban los pesebres domésticos, cantando y rezando para estimular a los fieles a recibir con alegría el nacimiento del Redentor.

En uno de esos hogares, que era muy pobre, les llamó la atención una diminuta imagen del Niño Dios. Parecía esculpido en madreperla, una masa de origen coralino que se forma en el fondo del mar. No tenía grandes pretensiones artísticas, pero sin duda despertaba devoción. Realmente era muy pequeño, ¡y al mismo tiempo encantador!

La familia entonces les contó su historia. La imagen había sido encontrada por su hijo en las rocas de la playa de Las Flores en Acajutla , cuando el padre se encontraba pescando en el mar. El joven la guardó como su mayor tesoro y todos los años era colocada en el pesebre en Navidad.

Allí, el Dulce Niño Jesús de Belén —como se conoció la minúscula imagen— comenzó a ejercer una gran atracción sobre el pueblo fiel.

A lo largo de los años la devoción se intensificó y el número de visitantes creció. Después de un minucioso examen, su culto fue aprobado por Mons. Luis Chávez y González, tercer Arzobispo de San Salvador.

Quien visita hoy la capilla del Colegio de Belén, en Santa Tecla, puede encontrar al pequeño Niño Jesús reclinado sobre un original arreglo, en una concha de ostra, que recuerda el procedencia de su descubrimiento.

A aquellos que lo visitan, el Niño Jesús parece repetir estas palabras del Evangelio: “Os aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él” (Mc 10, 15)

fuente: http://es.natal.arautos.org/

El Dulce Niño de Belén se encuentra en el Colegio Belén, Santa Tecla, de las hermanas Carmelitas. tel. 2229 7280

Nuestra Señora de Guadalupe

Se piensa generalmente que Juan Diego era un indígena “pobre” y de “baja condición social”. No obstante, sabemos hoy, por diversos testimonios, que él era hijo del rey de Textoco, Netzahualpiltzintli, y nieto del famoso rey Netzahualcóyolt. Su madre era la reina Tlacayehuatzin, descendiente de Moctezuma y señora de Atzcapotzalco y Atzacualco. En estos dos lugares Juan Diego poseía tierras y otros bienes en herencia.

Fue a este representante de las etnias indígenas del Nuevo Mundo a quien, ya hace casi quinientos años, la Madre de Dios apareció trayendo un mensaje de bienquerencia, dulzura y suavidad, cuya luz se prolonga hasta nuestros días.

Para comprender la magnitud del bondadoso mensaje de Nuestra Señora, debemos trasladarnos al ambiente psico-religioso de aquel tiempo.

De un lado, las numerosas etnias que habitaban el valle del Anahuac, actual Ciudad de Méjico, habían vivido durante décadas bajo el despotismo de la tribu más poderosa, en la que habitualmente se practicaban sangrientos ritos idolátricos. Anualmente, sacrificaban millares de jóvenes para mantener encendido el “fuego del sol”. La antropofagia, la poligamia y el incesto eran parte de su vida. Los celosos misioneros, llegados junto con los españoles, veían la necesidad imperiosa de evangelizar ese pueblo, extirpando tan repugnantes costumbres.

Entretanto, los malos hábitos adquiridos, la dificultad del idioma y, sobretodo, un cierto orgullo indígena de no aceptar el “Dios del conquistador” en detrimento de sus divinidades, hacían difícil la tarea de introducir en ese ambiente la Luz del mundo. Dios Nuestro Señor, en su infinita misericordia, queriendo que todos los hombres “se salven y lleguen al conocimiento de la verdad” (1 Tim 2, 4), preparaba una maravillosa solución para ese impasse.

Leer más…